Esta nueva versión mantiene el conocido motor monocilindrico inalterado, por aquello de que si algo funciona bien, para que tocarlo. Sin embargo, en la parte estética si se ha visto bastante modificada la pequeña 650, con la reconfiguración de diversas partes de la carrocería, incluyendo la nueva pantalla del velocímetro analógico con logotipo GS impreso y el asiento de dos colores; depósito de 14 litros, de diseño más delgado y optimizado ergonómicamente; sigue manteniendo el asiento de tres alturas: de serie, 780 mm; suspensión más baja, con asiento a 750 mm de altura (opcional desde fábrica); asiento alto (negro), 820 mm;
Parte frontal de mandos de deportiva estética, con faro asimétrico y tablero con combinación de instrumentos; parrilla portaequipaje; vano portaobjetos con tapa provista de cerrojo y llave; cristales de las luces intermitentes tintados de color gris y nuevos mandos en el manillar, entre otros pequeños pero multiples detalles.
Sin duda, una nueva inyección de energía para seguir manteniendo una firme posición en el mercado.
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